La primera de las finales contra rivales directos se saldó con victoria y con buen juego, ante un rival que conocemos y nos conoce perfectamente, como es el Masamagrell que, para variar, en ningún momento nos puso las cosas fáciles.
Comenzó el partido con un ataque muy fluido por parte de ambos equipos, anotando con cierta facilidad en ambas canastas y con pequeñas diferencias hacia uno u otro lado, hasta que una buena racha defensiva sumada a un gran acierto exterior nos permitía coger una primera ventaja interesante 17-10 a falta de poco más de tres minutos para acabar el cuarto. Pero una serie de malas decisiones defensivas traducidas en faltas personales, que permitía al rival conseguir un 2+1 más otros seis tiros libres sin fallo, los colocaba delante tras un 0-9, que equilibraríamos en una última canasta para así llegar con empate a 19 al final del primer cuarto.
Igualdad en los tres primeros minutos del cuarto (24-24) para conseguir un buen parcial a nuestro favor (6-0) que inmediatamente era devuelto por los valencianos (0-7) y equilibrio en el marcador hasta el mismo pitido final del cuarto, que dejaba la media parte en 34-34, tras un segundo parcial de empate a 15. Más igualdad era imposible.
Indicar que curiosamente durante la primera parte la desproporción en los tiros libres era alarmante, pues si nosotros habíamos lanzado solamente 4 (el primero a falta de dos minutos para acabar la media parte), el rival había lanzado 19, lo que se traducía en que el rival se había mantenido en el partido gracias a este importante elemento del juego.
El tercer cuarto lo empezamos con mucha energía y convencidos de nuestra superioridad, pero había que reflejarlo en el marcador, y desde el primer momento fuimos cogiendo ventajas en el marcador, primero 41-36, luego 44-39, pero el rival lejos de arrugarse seguía plantando cara, llegando a falta de cuatro minutos con un apretado 46-43. A partir de ahí y tras un tiempo muerto si que fuimos capaces de abrir una importante brecha en el marcador y conseguimos un 11-2 que nos dejaba a falta de un cuarto por jugarse con un marcador de 57-45 tras un gran parcial de 23-11.
Decir que si bien en la primera parte había ocurrido lo comentado con los tiros libres, en esas cosas extrañas que suceden a veces, la balanza esta vez se decantaba a nuestro favor y lanzábamos 13 tiros libres durante el tercer cuarto por ninguno del rival.
Habíamos encaminado muy bien el partido, al que además debíamos añadirle el factor "average", porque aparte de ganar sería muy importante hacerlo por más de diez puntos para tener ventaja en caso de empates finales, y de eso precisamente y ante el mismo rival sabíamos mucho de la temporada pasada...
Siguió en todo momento nuestra iniciativa, aunque el rocoso rival no permitía que nos fuésemos definitivamente en el marcador, incluso conseguía ponerse a falta de seis minutos a cinco puntos (61-56), pero fue su último esfuerzo, ya que tras un 8-0 a nuestro favor cogimos ventajas que en todo momento superaron los diez puntos, y que supimos administrar hasta el resultado final, tras un último parcial a nuestro favor de 23-22.
La próxima semana viajamos a Sagunto a enfrentarnos a otro de nuestro rivales directos, el Basquet Morvedre.
Anotadores: Alberto Luna (19 puntos en 32 minutos), Vicente Santaya (5 p. en 23 m.), Vicen Plasencia (6 p. en 18 m.), Carlos Fuertes (25 p. en 38 m.) y Manu Plasencia (8 p. en 34 m.) -cinco inicial- Alberto Benedicto (3 p. en 13 m.), Carlos Marín (8 p. en 16 m.), Rubén Villalba (0 p. en 3 m.), Raúl Molina (0 p. en 4 m.), Rudi López (0 p. en 8 m.), Javi Campos (0 p. en 2 m.) y José Barrachina (6 p. en 11 m.)
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