Un horroroso primer cuarto sentenció el encuentro ante el Almassora, un equipo de la parte alta de la clasificación, y la mejor defensa de la competición. Sabíamos que cuando un equipo deja habitualmente a sus rivales en muy pocos puntos significa que sabe llevarse los partidos a su terreno, y obviamente, una de las claves iba a ser saber cual de los equipos impondría su ritmo, y ahí, sin lugar a dudas los de la Plana pasaron como un rodillo durante el primer parcial, imponiendo desde el primer momento un ritmo defensivo fortísimo, con una defensa que nos impedía la más mínima fluidez en nuestro juego ofensivo, y además exhibió un ataque demoledor ante nuestra floja defensa. El resultado de ese primer cuarto fue de 11-25, y como he comentado decidió el partido, ya que a partir de ese momento y hasta su final el resultado fue de 40-34 a nuestro favor.
El segundo cuarto ya fue mucho más igualado, si bien a nosotros nos seguía costando mucho anotar por lo expuesto anteriormente, también conseguíamos ponernos a la altura física del rival e impedir su fluida anotación inicial. Igualado segundo cuarto que también se llevaron los rivales por 14-16, dejando el marcador al descanso con un elocuente 25-41.
El tercer cuarto comenzó con la misma tónica del segundo, pero con iniciativa rival, que conseguía en los primeros siete minutos dejarnos en 6 puntos por once de ellos, y así llegar a la máxima diferencia del encuentro (31-52) a falta de trece minutos por jugarse; pero si se observa los puntos que llevaban en ese momento y con los que finalizaron el partido puede verse claramente que el partido dio un vuelco total, ya que a partir de ese momento un 9-0 en ese cuarto nos metía de nuevo en el partido (40-52) con un último cuarto por jugarse, y habiendo ganado el parcial por 15-11.
El último cuarto nuestra defensa seguía muy bien, aunque la rival no bajaba el nivel en ningún momento, lo que hacía que a falta de 4:09 las cosas siguieran casi idénticas (44-59), pero tras un tiempo muerto y un cambio defensivo nuestro, éramos capaces de impedir que el rival volviese a anotar un solo punto en lo que restaba de encuentro, anotando nosotros siete en ese periodo, que obviamente no fueron suficientes para tener opciones de victoria tras lo sucedido en el primer cuarto. Último parcial nuevamente a nuestro favor por 11-7, y una segunda parte ganada por 26-18.
Anotadores: Rubén Villalba (0 puntos en 15 minutos), Vicente Santaya (8 p. en 18 m.), Vicen Plasencia (6 p. en 33 m.), Carlos Fuertes (7 p. en 23 m.) y José Barrachina (6 p. en 14 m.) -cinco inicial- Alberto Benedicto (2 p. en 26 m.), Carlos Marín (4 p. en 22 m.), Raúl Molina (2 p. en 17 m.), Rudi López (16 p. en 22 m.) y Javi Campos (0 p. en 12 m.). No jugó por lesión Alberto Luna.
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