lunes, 16 de noviembre de 2009

Un Cacho de la historia del atletismo español


Durante la celebración de unos Juegos Olímpicos, y refiriéndonos a la disciplina del atletismo, hay dos pruebas que paralizan el estadio y que poseen la aureola de míticas, colocando a sus vencedores en lo mas alto del Olimpo: los 100 metros lisos y los 1.500 m. En el verano del 92 y durante las magníficos Juegos que se celebraron en Barcelona, un atleta español nacido en 1969 en la localidad soriana de Ágreda llamado Fermín Cacho, conseguía lo que hasta entonces parecía una utopía, ser campeón olímpico de los 1.500 m. uniéndose a la larga lista de estrellas como Sebastian Coe, Paavo Nurmi o John Walker, a los que se les asociarían posteriormente Noureddine Morceli e Hicham El Gerrouj entre otros. Fue una carrera táctica que no se resolvió hasta la última vuelta, donde la punta de velocidad del soriano le permitió poner tierra de por medio y llegar a la meta con una gran diferencia sobre sus perseguidores.

Fermín Cacho abría así su espectacular palmarés en pruebas al aire libre, al que le seguiría una plata en los Mundiales de Stuttgart en 1993 tras el argelino Morceli, un oro en los Campeonatos de Europa de Helsinki 94, una plata en los Juegos Olímpicos de Atlanta 96 otra vez siguiendo la estela de Morceli, una nueva plata en los Campeonatos Mundiales de Atenas 97 tras el marroquí El Gerrouj, y por ultimo, un bronce en los Campeonatos de Europa de atletismo celebrados en Budapest en 1998 tras su compatriota Reyes Estévez y el portugués Rui Silva. Por si no fuera suficiente palmarés, sigue siendo a día de hoy recordman europeo y por ende español de la prueba, con una marca de 3´28´´95 realizada el 13 de agosto de 1997 en un miting en Zurich.
Nos encontramos pues ante uno de los mejores atletas españoles de todos los tiempos, si no el mejor. Os invito a ver de nuevo el vídeo de la final de Barcelona para así recordar el fabuloso momento.